jueves, 22 de abril de 2010

Esteban Traga

pues ya es jueves en la noche, y esta vez no nos reunimos para alimentar a la serpiente ,
ya sera el proximo jueves,porque en las sesiones en vivo es donde mas se regodea la reina(creo yo).
Pero bueno,esta vez les tengo preparado un sublime disquito de un gran trio..
El jefe es el clarinetista y se llama Jimmy Giuffre y se jaló al steve swallow en el contrabajo ,porque el disco es
de1961 y esteban que solo tenia 20 años todavia no cambiaba al electrico,y en el piano nada menos que el Paul Bley.
Era la epoca del free jazz mas desgarrador sin embargo Giuffre apostó por este trio en donde el silencio es el cuarto integrante
se le llegó a llamar chamber jazz,pues sea lo que sea esta de pocamadre ..

Y por otro lado me encontré otro trio bastante chidito..
Es de un acordeónista que se llama William Holshouer y trae al buen Ron horton en la trompeta..
Escuchen y deleitense mis carnales..

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3 comentarios:

El Nahual dijo...

Buenísimas recomendaciones, profiesor. El del Jimmy increíble y el Estaban Traga rifadísimo. Vientos.

Moonman dijo...

Jimmy Giuffre- Música que abre espacios y silencios de modo que el piano explore sus posibilidades cordales y el bajo alterne entre sus pulsos ritmicos y sus énfasis armónicos. Jimmy modulando entre lo temático y lo improvisado. Música semi-asbstracta que en su momento ha de haber desafiado los oidos refinados e instruidos. Más allá del avant-garde y más allá del hard bop, esta musica ofrece un festín digno de lo mejor del jazz vanguardista de principios de los 60s.

Will Holshouser Trio- Maravillosa exploración de la música Creole y Cajun en un ensamble que por la gran calidad estilística de sus integrantes renueva el estilo en una propuesta contemporanea y altamente sofisticada. El arcordeon encuentra un nicho de renovación en donde por momentos pierde su forma y su timbre par ofrecer un sonido nuevo. Estos músicos no sólo ejecutan sus instrumentos con gran estilo sino que también saben redefinir las fronteras entre lo clásico y lo contemporáneo.

rana dijo...

Me pongo de pie y hago un homenaje a la distancia agradeciendo el momento en que escucho esta música por primera vez. No mames que pinches discazazos.
Jimmy y su trio, ni quien dijera del buen sweallow en el bajo madera. Silencios, como ya se dijo, que permiten sonidos, que tejen estilos nuevos que aveces se escapan del jazz y se meten en algo nuevo. Jimmy y su clarinete con boquilla adaptad. Jimmy y el sonido que se escapa con las hojas amarillas que pronto caen.
Pero eso es lo de menos, hermanos lloro al escuchar por vigésima vez el fetin de musica que trae will y su trio y el mestro de maestros al piano, ese portugues Sassetti. Que chingon tejen cada nota explorando los sonidos. Un tejido misterioso que en lugar de aglomerar expande. Si la música fuera un cuadro aqui estamos porstrado ante un cuadro con un punto de fuga y una composición que permite ver el infinito. Es una música que abre el panorama y a mi en especial el corazón y me a despertado sentimientos que hace mucho no sentía al escuchar música. En especial esa rola del departamento de paz que me forma imágenes de una naturaleza ya vista con lagos y árboles otoñales, pero con colores nuevos...como un Monet o algo así. No exajero al decir que la e escuchado fácil 20 veces hoy...y no me canso. Ese arcordeon que rompe con lo tradicional en cuanto a timbre. El piano delumbra de tanto brillo, la corneta que penetra profundo en el pecho y el contrabajo que eleva mi espítitu a bailar en lo alto de los árboles otoñales con la musas y los duendes y fumamos nubes y no queremos bajar...porque ahi esta la felicidad.

Benjas te la mamaste con estas grandes recomendaciones. Levantemonos a bailar de nuevo...con las musas briagas de opio.